EL viernes ya no pude resistir y mis piernas me llevaron al Calamot para rodar por suaves toboganes mientras piso tierra, me envuelven los pinos y mis pulmones se llenan con el gratificante olor de la Ginesta. Si a Nueva York tuviera la intención de ir a dar el 100% esto habría sido casi un sacrilegio, por suerte no es así y este entreno no pasa de una mera salida del monólogo sobre asfalto que estoy realizando estas últimas/bastantes semanas.
Esta ha sido una semana que por motivos ajenos a mi no han caído kms en los entrenos como hubiera sido deseable
Pero qué poético se ha vuelto Agustín!!!!
ResponderEliminarEso es que estás tranquilo ¿no?
¿Cuando te vas??
Ya nos lo dirás.
AUPA AUPA
Besotes